◄ Los hermanos Pou han llamado “Torre de Mordor” al Pico Cão Grande de la isla de São Tomé, por su persistente niebla y las continuas lluvias.
Los hermanos Pou, Eneko e Iker, y Manu Ponce acompañados del cámara Jordi Canyigueral han puesto punto y final con éxito a su aventura de abrir una nueva vía en el espectacular Pico Cão Grande, situado dentro de la selva tropical del Parque Nacional Obo, en la isla de São Tomé. Los escaladores han hecho doblete, a pesar de que solo ha dejado de llover dos días en desde que se situaron al pie de esta aguja volcánica. En dos ocasiones han hecho cumbre.
En la primera ocasión se centraron en su objetivo principal que no era otro que el de abrir una nueva ruta a esta preciosa montaña, el segundo cuello volcánico más grande del Planeta. Además la escalaran en libre con dificultades muy altas de hasta 8b+ -la ruta pasa a ser la más difícil del Cao Grande- y una longitud de 450 metros. Los Pou han llamado a la nueva “leve Leve” , en honor al dicho popular más popular de estas islas, que traducido al castellano sería como “despacio, despacio” o “tranquilo, tranquilo”.
Para hollar la cumbre necesitaron catorce horas de actividad ininterrumpida para finalizar la vía y hacer cumbre con las últimas luces -eran las 18:00 y oscurece a las 19:00- y descender de noche hasta la base de la montaña. No fue fácil ya que estuvieron envueltos con niebla y encontraron condiciones muy difíciles por culpa del agua. La lluvia persistente del último mes,había dejado todo el pico muy resbaladizo.
Con la apertura de “Leve Leve” y la consecución de la cumbre, daban por logrado su reto dentro del proyecto “The North Face 4 Elementos”,pero tras unos días de descanso, los tres escaladores hicieron un esfuerzo importante, para volver a ascender al Cao Grande por la vía inglesa (“Nubivagant” 8b/450m) y conseguir la preciada primera ascensión en libre de esta línea. Esta vez fueron doce las horas ininterrumpidas que invirtieron de suelo a suelo
para lograr su objetivo.
Si durante la primera ascensión el mayor problema fue la roca mojada, durante esta segunda este hándicap se multiplicó por dos, ya que escalaron prácticamente toda la ruta empapada e incluso en algunos tramos tuvieron que seguir una pequeña cascada de agua, con lo que esto suponía de peligro de resbalar sufrir un accidente.
El otro problema que sufrieron durante las dos ascensiones fue el de la roca suelta. Tiraron sin querer infinidad de bloques que apunto estuvieron de provocar algún accidente. En más de una ocasión tras caer encima de alguna cuerda la dejaron inservible.
Los cuatro expedicionarios están muy satisfechos y felices de haber sabido aprovechar los dos únicos días sin lluvia para ascender hasta en dos ocasiones a esta preciosa torre de roca volcánica, que dada la persistente niebla y las continuas lluvias, han bautizado como la “Torre de Mordor”.
Ahora, los Pou deben decidir a donde viajaran para culminar su proyecto de los cuatro elementos que iniciaron en febrero de 2017 en la Patagonia Argentina con “Aupa 40” (Aire). En julio del mismo año continuaron en la Amazonía Peruana con “Yakumama” (Agua) y este julio han culminado en la isla africana de Sao Tomé “leve Leve” (Fuego)A los hermanos pou solo les queda el elemento “Tierra” para cerrar con éxito esta serie de retos que combinan el deporte extremo y la aventura.
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