◄ Sergi Mingote anuncia desde el campo base del Everest que regresa a Barcelona para recuperarse de una fisura en una costilla y de una infección respiratoria.
Los problemas en la salud de Sergi Mingote le obligan a renunciar a subir al Everest y regresar a Barcelona con urgencia. El alpinista tiene una fisura en una costilla y arrastra una persistente infección en las vías respiratorias, que no remite. La fractura es consecuencia del impacto recibido en el tórax por una piedra, cuando ascendía por el corredor final del Lothse.
La ascensión sin oxígeno suplementario al Everest requiere un estado óptimo de forma física y el montañero de Parets del Vallés arrastra demasiados problemas físicos como para intentarlo, a pesar de que días atrás había anunciado el ataque para el 22 de mayo. El Everest debía ser la quinta montaña de su proyecto 3x2x8000. Tras el techo del mundo iba el Kanchenjunga para completar su objetivo deportivo de ascender a seis ocho miles en un año sin oxígeno artificial.
Su renuncia al Everest también supone un nuevo cambio de planes en su carrera contrarreloj por conseguir su reto deportivo, ya que sustituirá el Everest y el Kanchenjunga por otras dos montañas. El propio Mingote avanzó que “El 13 de junio me marcho al Pakistán para afrontar el Gasherbrum 1 i el 2”. No lo ha hecho público, pero posiblemente afrontará estas dos cimas con el chileno Juan Pablo Mohr con el que ahora debía subir al Everest. El alpinista chileno sigue su intento de subir al Everest y lo hace en compañía del brasileño Moeses Fiamoncini. Inicialmente Mohr tenia previsto subir sin oxigeno suplementario, mientras Fiamoncini si tenia previsto utilizarlo.
Sergi Mingote, en julio de 2018 hizo cumbre en dos ocho miles -Broad Peak (8.051m) y K2 (8.611m). En setiembre 2018, holló el Manaslu (8.051m), pero debió renunciar al Dhaulagiri por las avalanchas de nieve. El anuncio de la renuncia lo ha hecho el propio Sergi Mingote desde las redes sociales con un pequeño clip de video grabado en catalán en el que la persistente tos es protagonista.
https://www.facebook.com/sergi.mingote.5/videos/854326051594767/
A modo de epilogo y antes de abandonar el campo base del Everest Sergi Mingote resumió lo que había estado la tercera parte su proyecto deportivo 3x2x8000, que tuvo dos caras muy diferentes. La satisfacción de hollar el Lothtse y la crudeza de vivir la experiencia de ver morir a un compañero. Por su interés reproducimos al completo la reflexión de Sergi Mingote.
“La muerte ha estado excesivamente presente esta primavera en el Himalaya. En el Annapurna, el Makalu, el Kanchenjunga y aquí en el Lhotse y especialmente en el Everest. Y la muerte en la montaña comporta siempre tristeza. ¿Sabéis por qué? Porque desde el momento en que un alpinista pisa la montaña está luchando por sobrevivir. Y en las expediciones de alta montaña mucho más. Y cuando se pierde la vida, se pierde la partida, y evidentemente pierde mucho más. Pierde a su familia, pierde a sus amigos, lo pierde todo.
Roby, Shay, Ivan…personas con las que he compartido risas, preocupaciones, momentos… fue bonito compartir con ellos la medalla de plata de mi hija Júlia y su beca, y ellos conmigo los “logros” de sus hijos, y por todo esto hoy estoy triste, muy triste.
La cumbre del Lhotse fue increíble, la temporada acabará con muy pocas cumbres sin oxigeno y eso es una recompensa fantástica para mí. Ya son 4 los 8.000 conseguidos dentro de los 365 días de este proyecto, Broad Peak, K2, Manaslu y Lhotse.
Después del duro rescate a 7.700 m de hace unos días, mi estado de salud no es el mejor, con una costilla tocada y una infección en los pulmones. Pero anímicamente es peor. Estoy triste, muy triste. Mis compañeros ya nunca volverán”.
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