La bicicleta eléctrica o e-bike es una excelente opción para la movilidad urbana.
La bicicleta eléctrica o e-bike es una excelente opción para la movilidad urbana. Es un vehículo económico, asequible y sustentable. No necesita seguro y no paga impuestos. Además, el fomento de la movilidad ciclista ayuda a mejorar los modelos de ciudad más eficientes. En los últimos años las redes ciclistas de las grandes ciudades españolas mejoraron mucho y circular por el carril bici es seguro. En paralelo, la oferta de los fabricantes sigue creciendo en todas sus subcategorías (E-MTB, E-URBAN, E-ROAD, E-GRAVEL y E-ENDURO).
En su momento, la aparición de la bicicleta de pedales con pedaleo asistido, conocidas como EPAC (Electronically Power Assisted Cycles) permitió acercar nuevamente el ciclismo a un colectivo que, en algunos casos, ya habia abandonado las dos ruedas por el desgaste que suponia sólo tirar del esfuerzo físico.
Quien no tiene una bici en casa. Hoy más que nunca, con todas las vicisitudes derivadas de la pandemia, el complejo panorama económico a nivel mundial, la preocupación por el medioambiente, consecuencia natural de la quema indiscriminada de combustibles fósiles; e incluso la popularidad que ganada por la práctica deportiva para el bienestar integral, queda claro que la bicicleta casi se convirtió en un artículo de primera necesidad para algunos ciudadanos.
¿Qué son las bicicletas eléctricas?
En medio de semejante panorama, es lógico pensar que esto de andar en bici no es algo nuevo. Es un vehículo sostenible, que en los últimos años «mutó» y dio lugar a un nuevo tipo de vehículo que cada día gana más fuerza en las calles. Se trata de la bicicleta eléctrica, que funciona mediante pedaleo asistido, en lugar de depender solo del movimiento de las piernas, ofreciendo con ello una funcionalidad que compagina lo tradicional con lo mejor de la tecnología.
Son cada vez más las compañías y marcas que apuestan por el desarrollo de nuevos y mejores modelos de e-bikes. Los catálogos crecen y se han vuelto más variados y asequibles. Y, precisamente, ese es el objetivo de este artículo: que conozcas por qué las bicis eléctricas gozan de tanta popularidad y establecer de un modo contundente y acertado el motivo por es interesante invertir en una. Así, trazaremos una pauta acerca de cuáles son las ventajas diferenciales que presenta el pedaleo asistido en relación con el resto de vehículos ciclomotores.
Componentes diferenciales de las e-bikes
Es importante que tengas presente que no es lo mismo una e-bike que un scooter o una moto eléctrica. Puede que tengan puntos en común, pero se diferencian claramente, cuentan con componentes que enmarcan su funcionamiento. Una bici eléctrica es, en pocas palabras, una normal, la de siempre que has usado para hacer ejercicio o que tus hijos disfrutan para ir al parque. Cuenta con pedales, pero está equipada con batería eléctrica.
Motor
La gran mayoría de las bicicletas eléctricas que encuentras en la actualidad cuentan con motores internos, integrados tanto en la maza delantera o trasera como en el eje central. Hay bicis que tienen un motor externo, capaz de transmitir la potencia a partir de una cadena. De cualquier modo, los motores de estos increíbles modelos se ofrecen en el mercado en una variedad de potencias que oscilan entre los 200W y los 700W, si bien hay países en los que sólo están permitidos aquellos de hasta 250W, es decir, que alcanzan una velocidad de hasta 25km/h, como es el caso de España.
Batería
Al igual que los scooters o las motos eléctricas, las e-bikes disponen de una batería. En el caso de las bicis, se trata de su corazón, como el cable fuente de un ordenador, encargada de activar las funciones del mecanismo y regular la energía transmitida al motor para que se ponga en marcha. Los tipos de baterías usadas en las bicicletas eléctricas son la de litio-Ion, níquel e hidruro metálico y plomo. Si tienes dudas al respecto, puedes consultar con los asesores de BIKE24.
Controladores
Son el cerebro de todo el mecanismo, los que dan las órdenes al motor y la batería; su función consiste en activar el motor y poner en marcha todo el circuito eléctrico. Pueden presentarse en distintos estilos, unos más sofisticados que otros. Entre los controladores que puedes encontrar está el acelerador, que puede ser de giro, como en las motos; o pedelec, más innovador porque monitorea el esfuerzo que haces durante el pedaleo para brindarte asistencia con el motor.
¿Por qué convienen las bicicletas eléctricas?
Son asequibles
Seamos realistas: todo esto suena muy bien, pero ¿qué hay del factor económico? A fin de cuentas, su precio puede decirnos mucho acerca de si es conveniente o no. Pues bien, partiendo de esa premisa, te sorprenderá saber que las e-bikes son más asequibles de lo que podrías haber imaginado. Ten presente que se trata de una inversión a largo plazo. El mercado ofrece un amplio abanico de precios. Puedes conseguir una bicicleta e-bike a partir de los 2.000€.
Ideales sin importar tu edad
Si de algo pueden presumir las e-bikes es de su capacidad para regular tu esfuerzo, permitirte estar en forma, pero sin abandonar la comodidad necesaria en la movilidad cotidiana. En caso de que algunos días te sientas motivado y quieras usar tu bici para hacer ejercicio, solo tienes que desactivar el motor. Por el contrario, si necesitas llegar al trabajo sin sudar, su componente eléctrico es la solución y lo mejor es que no tendrás que gastar en llenar un deposito de combustible.
Ahorras en transporte
Si haces cuentas, te horrorizarás al saber cuánto gastas en transporte público a lo largo de tu vida académica o laboral. Y si utilizas el coche habitualmente lo mismo porque la gasolina también tiene un coste elevado. Así que la bicicleta eléctrica es, sin ningún tipo de dudas, el medio de transporte más económico para nuestro bolsillo. En relación con los coches, la movilidad por kilómetro es siete veces más económica. Con una e-bike ya no tendrás que subir a un autobús o usar el metro.
Su mantenimiento no es costoso
Volvemos al tema de dinero. Ya sabes lo exigente que puede ser un coche, nuevo o usado, pues en algún momento empieza a pedir revisiones mecánicas y compra de repuestos. Y eso sin contar el llenado del depósito de gasolina. Por el contrario, las bicicletas eléctricas gozan de la particularidad de estar fabricadas a partir de materiales que precisan poco mantenimiento. En el caso de la batería, por ejemplo, podrías tener que reemplazarla cada 6 o 7 años, suponiendo que uses tu bici todos los días. Y, definitivamente, la inspección del estado de una bici eléctrica no es tan radical con tu economía como un coche.
Son eco amigables
Finalmente, su sostenibilidad es una de las cosas que hace de las e-bikes un medio de transporte de alta demanda, pues apenas emiten dióxido de carbono, no queman combustibles fósiles ni gases con impacto negativo, que causan el temido efecto invernadero. Recuerda que vivimos en una época en la que cada vez resulta más imperativo programarnos en pro de la conciencia ecológica, pues el planeta ya está manifestado el duro trato al que lo hemos sometido. Así que, si comienzas a utilizar una bici eléctrica para moverte por la ciudad, estarás contribuyendo tanto a la mejora de tu condición física como al cuidado de tu presupuesto y ayudando a reducir el CO2.
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