El termalismo ha estado presente en España desde tiempos inmemoriales, aportando un importante legado a la historia de la medicina, el patrimonio y la industria turística del país. Ahora, la creciente preocupación por el cuidado de la salud y el bienestar ha ocasionado la segmentación y la diversificación de la oferta termal, lo que se traduce en un incremento de los productos y servicios y en la incorporación de nuevas opciones, como la talasoterapia, los alojamientos singulares con spa, el termalismo lúdico, cultura, familiar, corporativo de empresas.En la actualidad, el turismo termal es una oportunidad para crear empleo y abrir nuevas vías de negocio.
En este sentido, la presentación de este informe sobre el Turismo Termal en España, dirigido por el consultor Mario Crecente, ha radiografiado el sector que en 2015 tuvo una cifra de negocio de 225 millones de euros y ofertó 20.000 plazas entre los 114 balnearios existentes en la geografía española. El libro blanco del sector, que se ha presentado en la Casa de Galicia en Madrid, ha sido publicado por la Escuela de Organización Industrial (EOI) y ha sido cofinanciado por el Fondo Social Europeo y el Ministerio de Industria, Energía y Turismo.
Documento de reflexión
En el transcurso de la presentación, en la que intervinieron el delegado de la Xunta en Madrid y director de la Casa de Galicia, José Ramón Ónega; el director general de la Vuelta a España 2016, Javier Guillén; el director general de la Escuela de Organización Industrial (EOI), Fernando Bayón; y el presidente de la Diputación de Ourense, Manuel Baltar- el autor, Mario Crecente, ha destacado que se trata de «un documento de reflexión estratégica para el sector que tiene por objetivo configurar una oferta turística renovada, sostenible y de calidad, que contribuya a la creación de empleo. El posicionamiento de este sector en España es poco claro entre los intermediarios especializados, ya que hay una escasa presencia en los catálogos de touroperadores Internacionales.” Crecente ha destacado que “las principales comunidades receptoras en este tipo de turismo fueron Cataluña, Canarias y Baleares. Por su parte, los principales mercados competidores son Francia, Portugal e Italia.”
A nivel español Crecente quiso destacar que “Galicia es la comunidad termal de España puntera, tanto por sus recursos, como por el mayor número de villas termales, balnearios y plazas. En el caso de Ourense, es «la capital termal», que además cuenta con el manantial con la mayor temperatura, (Lobios con 76 grados)».
En resumen, el nuevo estudio sobre el sector del Turismo Termal en España es un documento de reflexión estratégica para el sector que tiene por objetivo configurar una oferta turística renovada, sostenible y de calidad, que contribuya a la creación de empleo.
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