Aymar Navarro decidió poner punto y final a su primera expedición al Himalaya sin poder descender la pared de la montaña que pretendía bajar con esquís.
39 días después de su llegada a Nepal, Aymar Navarro decidió poner punto y final su primera expedición al Himalaya. El esquiador extremo reconoció que la montaña que pretendía esquiar no estaba en condiciones para efectuar un descenso con esquís. Aymar Navarro anunció el final sin desvelar la montaña (1) que le tuvo en jaque la última semana, junto al alpinista italiano Simone Moro su mentor en su primera aproximación al Himalaya. El aranés junto al resto del equipo abandonó el campo base, 5.300 metros, situado a 5 kilómetros en línea recta del CB del Everest. Aquí estuvo la última semana, tras superar el edema agudo de pulmón, que le retuvo dos semanas en Katmandu.
Aymar Navarro: «cuando la montaña habla sólo nos queda escucharla, asumir el mensaje y por muy doloroso que sea, dar media vuelta»
Aymar Navarro se sinceró en sus redes y destacó que “hay cosas contra las que uno no puede luchar, y cuando la montaña habla sólo nos queda escucharla, asumir el mensaje y por muy doloroso que sea, dar media vuelta para bajar. Cuando uno lo da todo y más, no hay nada que reprochar, aunque duela. Las condiciones en la montaña han empeorado en los últimos días, el calendario aprieta y la viabilidad de hacer una actividad con garantías son argumentos de mucho peso para tomar esta difícil decisión de poner rumbo de vuelta a casa. Además, pese a poder retomar la expedición después de sufrir el edema agudo de pulmón, lo cierto es que siendo sincero conmigo mismo no estoy al 200%, condición indispensable para un terreno tan exigente como este”.
«Para muchos quizás sea un fracaso, pero para mí ha sido una expedición llena de aprendizaje»
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Aymar Navarro agradeció el trabajo y profesionalidad de Simone Moro y del resto de su pequeño equipo de filmación formado por los cámaras Adri Martinez, Jaime Varela y Carlos Llerandi. El freerider aranés manifestó que “lo hemos dado todo hasta el último día. Remando contra todos los problemas que nos hemos encontrado sin perder la ilusión ni la motivación y esto aún hace más duro tomar esta difícil decisión. Para muchos quizás sea un fracaso, pero para mí ha sido una expedición llena de aprendizaje donde todos hemos ganado muchísima experiencia y hemos conseguido obtener mucha información para en un futuro volver a la carga con este mismo objetivo”.
Por su parte Simone Moro manifestó que «la montaña este año no resultó favorable. La suerte no estaba de nuestro lado, pero eso es lo que hace del montañismo un arte: saber escuchar, saber esperar y volver a intentarlo».
De las palabras de Aymar Navarro se desprende que aprovechó a fondo la experiencia de su primer contacto con el Himalaya y que volverá de nuevo para descender su montaña iniciática.
(1) Conocemos el objetivo alpinístico de Aymar Navarro, pero como él no desveló la montaña no seremos nosotros quienes rompamos el secreto.
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