El mural que homenajeaba a los escaladores Iker y Eneko Pou en Vitoria-Gasteiz ya es cosa del pasado. En noviembre de 2016, los grafiteros Garikoitz Arregi y Diego Barruete crearon espontáneamente esta obra en el número 9 de la calle Iturritxu, frente a la Ikastola Adurtza, como tributo a la trayectoria de los Pou, dos de los escaladores locales más destacados del panorama mundial. Sin embargo, tras siete años en la pared, el mural ha desaparecido, primero como víctima del vandalismo y, finalmente, reemplazado por una nueva pintura tras el traspaso del bar Vaneli. El grafiti ocupaba la pared junto a la terraza, pero los nuevos gestores, con escasa sensibilidad por la obra anterior, decidieron eliminarlo y encargar otro mural decorativo.
Homenaje Popular y Altruista
La historia de este mural comenzó como un proyecto anónimo de Garikoitz Arregi y Diego Barruete, quienes, movidos por la admiración hacia los hermanos Pou, decidieron plasmar su imagen en la pared sin encargo ni patrocinador alguno. La obra, llena de color y elementos naturales, representaba a los escaladores en un entorno montañoso, con un río y una luna iluminando el paisaje.
Iker y Eneko se mostraron profundamente agradecidos. «Que en tu ciudad, sin nuestro conocimiento, y sin un encargo por parte de nadie, o sea de una manera espontanea te hagan este pedazo de mural es sin lugar a dudas el mejor homenaje que nos hayan hecho nunca a lo largo de nuestra carrera. Es la muestra de cariño y reconocimiento popular mas grande que se le pueda hacer a una persona. La verdad es que estamos encantados y queremos agradecer de corazón a los artistas Garikoitz Arregi y Diego Berruete todo este trabajo”, expresaron emocionados en la presentación del mural.
Entre el Vandalismo y la Desaparición
A pesar de su valor simbólico y popularidad, el mural no escapó a la fragilidad de su naturaleza urbana. En el verano de 2022, un año y medio antes de su desaparición definitiva, el mural sufrió un acto vandálico con pintadas que cubrieron los rostros de los Pou. Entre las frases escritas se leía: “Libertad para vivir o muerte, la elijo yo” y “Con mis euros elijo yo”. Según testimonios de vecinos, el autor de las pintadas fue una persona del barrio que, tras ser confrontado por la comunidad, intentó reparar el daño cubriendo sus propios mensajes con pintura blanca. Sin embargo, el deterioro y el mal ya estaba hecho, y tanto los hermanos como los artistas consideraron que restaurarlo implicaría un trabajo tan extenso que decidieron no intervenir.
Mural efímero
Con el cambio de dueños del bar Vaneli, el mural de los Pou, que ocupaba la pared junto a la terraza del establecimiento, fue finalmente eliminado. Los nuevos gestores decidieron aprovechar el espacio para crear una nueva pintura en sintonía con la imagen del negocio, poniendo fin al homenaje artístico a los hermanos Pou. Los Pou expresaron su tristeza ante la desaparición de la obra, conscientes de que los grafitis son un arte efímero. “Sabíamos que en cualquier momento podía suceder, pero qué pena da ver que después de siete años haya ocurrido…”, compartieron en redes sociales. Para los escaladores, fue una gran muestra de cariño popular, y lamentan no haber podido conservarlo como ocurre con otros murales de la ciudad.