◄ El madrileño Carlos Caravias y la bilbaína Amaia Urkidi ganaron la vigesimoséptima edición de la marcha ciclista de la Quebrantahuesos 2017 sobre 200 kilómetros y un desnivel acumulado de 3.500 metros.
El gran protagonista de la vigesimoséptima edición de la marcha ciclista de la Quebrantahuesos 2017 ha sido el calor y las altas temperaturas que han tenido que lidiar los 10.176 ciclistas que han tomado parte en la prueba más multitudinaria que se disputa en la geografía española de cicloturismo, con salida y llegada en Sabiñanigo, Pirineo aragonés. Habitualmente lo más destacado eran las caídas, pero este año las elevadas temperaturas han provocado más de un golpe de calor en alguno de los participantes. La rápida intervención de los servicios médicos ha evitado males mayores y todo ha quedado en varios sustos. La organización no ha facilitado los ciclistas que no han concluido la prueba.
La prueba reina, la Quebrantahuesos Gran Fondo, se ha disputado sobre 200 kilómetros y tiene un desnivel acumulado de 3.500 metros. Los puntos fuertes son los ascensos a los puertos de Somport, Marie Blanche, Portalet y Hoz de Jaca. La victoria ha sido para el madrileño Carlos Caravias (5:40:49) del equipo ciclista máster del BoBruC-Oil y para la bilbaina Amaia Urkidi (06:22:17). Se trata de una prueba cicloturista donde los que toman parte se ponen a prueba y persiguen completar sus objetivos deportivos personales, que varían en función de su edad, preparación física etc. No obstante, también hay algunos competidores que se toman la carrera como una competición pura y dura, lo que a veces «choca» con el espíritu de este tipo de pruebas.
En la Treparriscos Medio Fondo han participado 2.114 ciclistas sobre un recorrido de 100 kilómetros. Alejandro Verdejo (2:25:01) ha sido el primero en llegar a meta, con un tiempo de 02:25:01, y Pilar Pijuan (2:47:04) la primera mujer.
Tras la salida de Sabiñánigo, los ciclistas de la Quebrantahuesos han rodado hasta Jaca, donde les esperaba numeroso público, camino de la primera ascensión de la jornada. Por delante había el puerto de Somport, que une España con Francia, de 28 km de largo. Tras superar superar la frontera y descender Somport el gran pelotón había de afrontar el Marie Blanque el primer puerto francés y más exigente del recorrido. 10 km de ascenso con 6 km iniciales de montaña, pero que no tienen nada que ver con los últimos 4km. Rampas con un porcentaje de entre el 10% y el 14%. Descenso con dirección a Laruns desde donde comienza a la tercera subida de la jornada, el Col de Portalet de 28 km de longitud. Tras superar el puerto el gran grupo ha iniciado el regreso en dirección a Sabiñanigo con la Hoz de Jaca como última subida del trayecto. Tramo corto pero exigente que se ha atragantado a los ciclistas que llegaban con fuerzas escasas.
Para superar el recorrido de la Quebrantahues, los participantes han contado con diferentes puntos de avituallamiento y mecánicos que han atendido todas sus necesidades. Alrededor de mil voluntarios, así como con un gran despliegue médico y de seguridad, ha velado por el buen funcionamiento de la prueba. A la llegada, los participantes han podido utilizar los diferentes servicios que ofrecía la organización, como por ejemplo: duchas, fisioterapia, diplomas y comida popular. Entre el gran pelotón han rodado los exciciclistas profesionales como Miguel Indurain, Melcior Mauri, Óscar Pereiro y Abraham Olano o el rider de mountainbike y medallista olímpico José Antonio Hermida.
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