El Airbus A330-200 de Iberia voló de Katmandu a Madrid en un vuelo directo de once horas y cuarenta minutos.
El medio centenar de alpinistas y turistas españoles repatriados de Katmandu llegaron a Madrid en un vuelo de Iberia fletado por el Ministerio de Asuntos Exteriores. Los montañeros estaban atrapados desde hace días en la capital de Nepal, tras el cierre de las fronteras y de vuelos internacionales decretado por las autoridades nepalíes para hacer frente a la nueva ola de contagios de la covid-19 por la variante india del virus. El viaje entre Katmandu y Madrid fue directo, duró 11 horas y 40 minutos y lo hicieron a bordo del ‘Johannesburgo’ un Airbus A330-200 con capacidad para 288 pasajeros, que en esta ocasión viajaba sólo con la mitad del pasaje por cuestiones sanitarias.
En el viaje de ida la aeronave llevó ayuda médica a Nepal. En concreto un cargamento por valor de alrededor de un millón de euros. Más de 5 toneladas de material sanitario donado por el Gobierno de España en el que iban 15 respiradores, 10 concentradores de oxígeno, más consumibles y repuestos y 144.000 mascarillas FFP2. Además de 125.000 test de antígenos.
Finalmente no viajó el alpinista vasco Alex Txikon, que dio positivo al realizar su última PCR.
Entre los alpinistas que regresaron estaban Jonatan García, Carlos Soria, Sito Carcavilla, Luis Miguel Soriano y el grupo de trekking que encabezan los montañeros Sebastián Álvaro y Juanito Oiarzabal. Finalmente, no viajó el alpinista Alex Txikon que dio positivo en la última PCR. Si volvieron el periodista Iñaki Makazaga y el fotógrafo Sendoa Elejalde, que le acompañaban en su ligera expedición. También regresaron algunos alpinistas sudamericanos y europeos, como los andorranos Stefi Troguet y Domi Trastoy, el griego Antonios Sykaris o el eslovaco Peter Hámor y los rumanos Horia Colibasanu y Marius Gane. Los tres últimos querían ascender el Dhaulagiri a través de una nueva ruta por la arista noroeste.
A su llegada al aeropuerto de Madrid todos los pasajeros han debido someterse a test de antígenos para conocer si alguna personada estaba infectado por el coronaviruss. Uno de los primeros en abandonar el aeropuerto fue Jonatan García. El alpinista estaba en un hotel de Katmandu desde el 12 de mayo, tras abortar su intento de ascensión al Dhaulagiri.
A su llegada a Madrid todos los alpinistas debieron someterse a un test de antígenos, antes de abandonar las instalaciones aeroportuarias.
Turiski se puso en contacto con el alpinista antes de que continuara el viaje en coche hasta Benasque donde reside. Jonatan García quiso agradecer a las autoridades españolas el esfuerzo hecho y reconoció que “ha sido un vuelo muy cómodo y sin escala, todo un lujo. Inicialmente por cuestiones de peso no colocaron en la parte de atrás del avión, pero posteriormente pudimos resituarnos cómodamente y espaciados para mantener las distancias de seguridad”.
Jonatan García:»cuando llegamos a Katmandu, a mediados de marzo, había mucho control, pero posteriormente las medidadas se relajaron.»
Jonatan Garcia estaba en Nepal desde el 11 de marzo, cuando aterrizó en Katmandu, después de un vuelo con escala iniciado desde Barcelona y en compañía de Stefi Troguet. El alpinista destacó que “cuando llegamos a mediados en marzo a Katmandu había mucho control y debimos hacer la cuarentena en el hotel y pasar la preceptiva prueba antes de ponernos en marcha. No obstante, poco a poco las autoridades locales rebajaron los controles y finalmente la pandemia se descontroló. Primó la parte económica sobre la salud. Una muestra es que los contagios llegaron a los campos base del Everest y el Dhaulagiri. Lamentablemente la situación en Nepal es desoladora».
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