Ander Mirambell ha finalizado el campeonato del mundo de skeleton que se ha disputado en Igls 2016 en vigesimoséptima posición, tras dos jornadas de competición y tres mangas. Mirambell se marcha del circuito austríaco con un buen sabor de boca. El deportista barcelonés ha firmado la vigésima plaza en la tercera manga, algo que le ha permitido recortar tiempo respecto a los deportistas que le precedían, situándose a medio segundo del suizo Marco Rohrer, vigesimosegundo. El atleta ha reconocido que “la salida ha sido algo surrealista, ya que he ido a muerte y he rebajado mi marca en este circuito en media décima. Parece que me sienta bien correr por la tarde. Estoy muy contento con el pilotaje, ya que he hecho una bajada de Top20, pese a que nos ha costado mucho adaptarnos al trineo en este circuito.”
Mirambell cierra el Mundial “con la satisfacción de haber hecho marca personal en la salida y en la línea de meta, y más sabiendo que tenemos margen de seguir mejorando porque veo que con un ligamento cruzado roto puedo estar ahí. Esta bajada además me motiva mucho para afrontar el resto de la temporada; la Copa del Mundo de Konigssee y las dos últimas Copa América que haré en Estados Unidos”.
El piloto ha afirmado que “lo peor es que lo que hemos conseguido en la tercera manga no ha quedado reflejado en el resultado, y a veces no es del todo justo. El deporte no entiende de justicia, si no de resultados. Hemos estado haciendo un gran trabajo y no ha salido”.
Su entrenador “compartido”, el austiraco Martin Riettl, no estaba satisfecho porque considera que “a Ander le falta regularidad en las grandes competiciones. Ves que puede estar luchando con los 20 mejores, pero en la primera jornada no tuvo su día. En el segundo día de competición ha enseñado lo que es capaz de hacer y esperemos que esta bajada marque el camino a seguir hasta el final de temporada y para los dos próximos años de cara a los Juegos Olímpicos de 2018”.