◄ Astrid Fina ha conseguido la primera medalla para la pequeña delegación española -4 atletas- que participa en los Juegos Paralímpicos de PyeongChang.
A Astrid Fina (Barcelona, 1983) un accidente de motocicleta le cambió la vida cuando tenía 25 años. La cirugía le salvó la pierna, pero una infección recurrente que arrastró durante tres años la obligó finalmente a tomar la determinación de amputar la pierna derecha por la tibia.
Después el snowboard se cruzó en su vida e hizo un giro de 180 grados. Comenzó de cero, pero tuvo la suerte de poder integrarse al equipo de la Federación Española de Deportes de Personas con Discapacidad Física (FEDDF).
El snowboard debutaba en los Juegos Olímpicos de Sochi 2014 y se estaba formando un equipo. En la cita rusa, Astrid consiguió la sexta posición final. Poco a poco y a base horas de entrenamiento, Astrid Fina ha ido puliendo el estilo. En los últimos años lo ha hecho en el Centro de Deportes de Invierno Adaptados de la Val d’Aran, que es un centro de alto rendimiento. Su primera gran explosión a nivel de resultados se produjo el año pasado en estación de esquí de La Molina. La snowboarder se colgó cuatro medallas de plata en la Copa del Mundo IPC 2017.
En los Juegos Paralímpicos de PyeongChang ha aprovechado posiblemente la última oportunidad para colgarse una medalla olímpica. A los 34 años, la rider barcelonesa ha ganado el bronce en la disciplina de snowboardercross, categoría SB-LL2.
En la ronda de clasificación Astrid Fina, en la que las riders bajan en solitario, consiguió el quinto mejor tiempo con un crono de 1:23.11. La más rápida fue la holandesa Bibian Mentel con 1:07.51, que es la actual dominadora de la especialidad.
Ya en cuartos de final la rider catalana ha superado a la canadiense Sandrine Hamel. No obstante, en semifinales ha perdido con la holandesa Bibian Mentel, ganadora del oro, y que defendía el título de Sochi. En la lucha por el tercer puesto Astrid Fina ha superado la también holandesa Renske Van Beek.
Astrid Fina muy emocionada ha manifestado en la misma linea de meta que «tenia miedo de no cumplir el objetivo, pero no había visualizado una medalla, aunque llevamos trabajando cuatro años para esto. De todo lo que he sufrido ahora no me acuerdo. Ha sido un trabajo muy duro. He estado lejos de mi familia, lejos de mis amigos y en momentos con mucha fatiga. Todo ha valido la pena y pensaría que ahora pasaría otro año así. Ahora pienso en la modalidad de banked eslalon. No sabemos cómo será el circuito, solo que será distinto, aunque igual dejan algún peralte. Nos dijeron que entrenaríamos dos días, pero al final será uno. Lo voy a dar todo. Aunque ya tenga la medalla no me voy a relajar».
Su victoria simboliza el premio a su esfuerzo, su constancia y la capacidad de sufrimiento que hay detrás de esta medalla de bronce. Astrid Fina, entrenada por Albert Mallol, también tiene opciones de conseguir otra medalla en la especialidad de banked slalom, que se disputa viernes en el Jeongseon Alpine Center de PyeongChang.
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