Las primeras imágenes de la ascensión de Carlos Soria al Aconcagua (6.962 m) ya están aquí. A sus 86 años, el veterano alpinista ha vuelto a demostrar su increíble resistencia y determinación al alcanzar, por tercera vez en su trayectoria montañera, la cumbre del techo de América. Una expedición que no solo ha supuesto un nuevo reto personal, sino también una prueba fundamental para su próximo gran desafío: la ascensión al Manaslu (8.163 m), con la que conmemorará el 50 aniversario de la primera expedición española que logró coronar un ochomil principal.
Carlos Soria ha completado la ascensión por la vía normal, acompañado de su inseparable amigo y excepcional cámara Luis Miguel Soriano, quien ha documentado cada paso de esta nueva hazaña. La expedición, que comenzó días atrás desde el campo base, avanzó estratégicamente hasta el campo II (Nido de Cóndores, 5.500 m), donde el equipo pasó dos noches esperando una ventana de buen tiempo. Desde allí, ascendieron hasta el campo III (Cólera, 6.000 m) el 18 de febrero, y a la madrugada siguiente partieron hacia la cumbre, alcanzándola al mediodía del 19 de febrero.
Carlos Soria: un ejemplo de perseverancia y voluntad en la montaña
El propio Soria ha compartido sus sensaciones tras esta nueva cumbre, reconociendo que, a pesar del paso del tiempo y los obstáculos físicos, su espíritu sigue intacto. “Con los años y las operaciones he perdido movilidad, he perdido equilibrio, pero no he perdido nada de ganas de vivir y de seguir subiendo montañas. Eso lo tengo intacto, con la cabeza en su sitio y haciendolo bien.”
Su éxito en el Aconcagua cobra aún más valor si recordamos que lleva una de prótesis en la rodilla izquierda, desde octubre de 2018, y el año 2023 sufrio un grave accidente en el Dhaulagiri. Durante el intento de ascenso a la cumbre, un sherpa cayó sobre él cuando estaba sobre los 7.650 metros, 450 metros por encima del campamento 3. El rescate y su evacuación fueron muy complicados, pero finalmente fue llevado al campo 2, a 6.470 metros desde donde fue recogido por un helicópotero.
Con el Aconcagua en el bolsillo, Soria se centra ahora en su próximo gran objetivo: el Manaslu. Esta expedición, que aún busca patrocinadores, tiene un significado especial, ya que rememora el medio siglo desde que un equipo español alcanzó por primera vez un ochomil principal, hito en el que participó el propio Soria con la Real Sociedad Española de Alpinismo Peñalara.
A sus 86 años, Carlos Soria sigue escribiendo su propia historia en las montañas. Y, como ha demostrado una vez más, aún queda mucho por contar.