La organización no quiere tomar riesgos innecesarios ante la situación sanitaria y la incidencia de la covid-19 en Nepal.
La Everest Trail Race, que debía disputarse entre el 8 y 20 de noviembre, se suspende por segundo año consecutivo ante la inseguridad sanitaria y la obligatoriedad de las cuarentenas en Nepal. La organización anunció en un breve comunicado destacando que “aplaza su celebración al mes de noviembre del próximo año 2022, aunque pendiente de fechas definitivas. Las razones, aunque sensiblemente distintas a las del pasado año, son igualmente dolorosas para la organización de la prueba. La segunda ola en Nepal resultó especialmente virulenta hasta hace pocas semanas, motivando un largo confinamiento para la población, y cierre, o apertura parcial del aeropuerto, además de cuarentenas obligadas a los extranjeros a su llegada al país, a través de los poquísimos vuelos autorizados. A día de hoy, las restricciones a la entrada en Nepal, son de cuarentena obligatoria., tanto para vacunados, como para no vacunados.
Nepal está en la lista roja de muchos países, por lo que hay que añadir otra cuarentena obligatoria al regresar al país de origen, que en el caso de la Everest Trail Race afecta a 2/3 partes de los participantes inscritos. Muchos de ellos solicitaron aplazar su participación al 2022”.
La baja tasa de vacunación, cercana al 10%, sumada a augurios poco optimistas respecto a una inminente tercera ola, de la que están avisando repetidamente los medios de comunicación locales, no hacen presagiar el mejor escenario para disputar la décima edición de la Everest Trail Race.
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