El esquí de velocidad tendrá un antes y un después de los campeonatos del mundo del kilómetro lanzado, que se celebraran del 28 de febrero al 3 de marzo y que incluyen dos pruebas puntuables para el circuito de la Copa del Mundo. La modalidad deportiva, que celebró su primera competición reglamentada el año 1930 en Murren (Suiza), está a punto de reinventarse. Hasta ahora la evolución se había producido en los esquís, las botas, los monos de látex y el casco por citar los elementos más importantes, pero la idea cocinada por Nadal Antor, director de actividades de Grandvalira-Saetde, de instalar una torrre de lanzamiento en la salida de la pista Riberal supone una revolución en esta especialidad. La Federación Internacional de Esquí (FIS) ha visto con buenos ojos la iniciativa de la estación andorrana que ha tenido, eso sí, el apoyo de las grandes figuras de esta minoritaria modalidad. El italiano Simone Origone, actual recordman del kilómetro lanzado con 252,4 km/h, el suizo Philipe May, el austriaco Klaus Schrottshammer o veterano guipuzcoano Ricardo Adarraga, que el año pasado estableció el record español en 240,642 km/h, han apoyado e incluso en algún caso supervisado el proyecto. La torre que se instalará es un prototipo único que se ha diseñado con total libertad. La FIS ha dado luz verde, pero no ha homologado el diseño, aunque no nos extrañaría que una vez acabada la competición podría cambiar de opinión si hay algunas estaciones interesadas en organizar competiciones de los “locos de la velocidad. En la actualidad el circuito mundial tiene un reducido grupo de estaciones dispuestas a acoger pruebas de Kl y sólo la entrada de nuevas pistas podría ayudar mejorar su promoción. En este sentido la autorización de la torre de lanzamiento supone una revolución para esta disciplina que tuvo su máxima popularidad cuando fue deporte de exhibición en los Juegos Olímpicos de Alberville del año 1992.El escenario fue la espectacular pista de Les Arcs que estuvo operativa hasta el año 2007, cuando a raíz de un trágico accidente de la inglesa Caitlin Tovar la estación decidió cerrarla.
La estructura de la torre tiene 10 metros de altura y un peso total de 4.778 kg. La base de salida de la plataforma aguanta hasta 500 kilos y está pensada para dos personas; el esquiador y el controlador. La longitud de la rampa tiene 18 metros y la anchura útil es de 1,3 metros. El personal de Grandvalira ya ha montado la estructura de hierro galvanizado y ya ha realizado las primeras pruebas en seco de la torre para comprobar estabilidad, anclajes y otras medidas de seguridad. En este sentido, Nadal Antor, ha destacado que «lo primero que hemos tenido en cuenta es la seguridad. La torre ha sido certificada por el Colegio de Ingenieros de Canales, Caminos y Puertos de Barcelona y aunque nos ha dado alguna noche de insomnio, el resultado ha sido muy agradecido. La estructura es un prototipo único en el mundo que ha hecho la empresa catalana, Cover-Teg. Es la primera vez que se produce una estructura así para una competición de esquí».
REACCIONES POSITIVAS
El campeón español Ricardo Adarraga ha querido destacar que «Grandvalira ha demostrado una vez más su apuesta por el kilómetro lanzado. La rampa está bien pensada y por sus características se puede adaptar perfectamente a las condiciones de nieve y de la pendiente. Con la torre ganaremos unos metros de desnivel que según las condiciones de la nieve y el tiempo podrían darnos los 15 km/h que nos faltan para llegar a los 200 km/h. Con esta construcción Grandvalira se coloca junto con Vars a la cabeza mundial del kilómetro lanzado. Aparte de Vars y Grandvalira ninguna otra pista del actual circuito de KL puede aspirar en estos momentos a los 200 km/h”.
Por su parte el inglés afincado en Madrid, Jan Farrell, actual campeón de de la categoría SDH, y que esta temporada debuta en la categoría reina tampoco ha escatimado elogios al reconocer que “la torre de lanzamiento de Grandvalira es una seria apuesta por el futuro de nuestro deporte. Tener por primera vez la oportunidad de batir los 200km/h en los Pirineos puede ser un histórico sin precedentes. Es un golpe de efecto de marketing; las tomas e imágenes de los corredores saliendo desde la cima van a dar la vuelta al mundo. Gracias a Grandvalira y en especial al artífice de la idea, Nadal Antor, por hacer esto posible; me muero por bajarla ya!!! Este tipo de esfuerzos ayudan enormemente a promover el deporte de invierno y el Speed Ski. Además, esta publicidad nos ayuda en el desarrollo de nuevas competiciones; espero que nuestro trabajo de sus frutos y que de aquí a dos años también tengamos una Copa del Mundo de Kilómetro Lanzado en España.»
Como se trata de la primera vez que se utiliza una torre de salida dentro de la disciplina del kilómetro lanzado, Grandvalira ha preparado unas jornadas de entrenamientos libres del 12 al 16 de enero abiertas a todos corredores del circuito de la categoría reina, Speed 1, que quieran probar la rampa antes de los Campeonatos del Mundo. El Mundial se celebrará del 28 de febrero al 1 de marzo y seguidamente, los días 2 y 3 de marzo, se disputarán dos pruebas del circuito de la Copa del Mundo.