Jordi Tosas y Philipp Brugger son abanderados del concepto velocidad y ligereza en la montaña (fast and light)
Los alpinistas Jordi Tosas (1968) y Philipp Brugger (1991) incian una expedición en estilo alpino muy especial. Los dos montañeros son abanderados del concepto velocidad y ligereza en la montaña. Sin prácticamente publicidad viajan al Karakorum pakistaní para afrontar el ascenso del Muchu Chhish (7.452m), también llamado Batura V. Nunca nadie antes ascendió a esta cima. La cima forma parte de las montañas Batura Muztagh, una sub-cordillera de la cordillera del Karakorum. Están ubicados en el valle de Gojal, en el distrito de Hunza de la provincia de Gilgit-Baltistan, al norte de Pakistán. Muchu Chhish es la segunda cima no escalada más alto del mundo. Es más, un pico secundario que una montaña propia desde un punto de vista geográfico debido a su baja prominencia (desnivel entre la cumbre y el collado al pico más próximo) es de 263 metros.
Jordi Tosas sobre el Muchu Chhish: «La veo fácil, pero nadie ascendió. Quiere decir que tiene algo por allí en medio que no vemos»
Pero como muy bien reconocia el propio Jordi Tosas, al periodista Nacho Viscasillas de Sport Aragon, antes de viajar. “Si, la miro y la veo fácil, pero nadie ha subido. Esto quiere decir que tiene algo por allí en medio que no vemos. Toda montaña tiene un secreto y no se lo han encontrado. Han fallado expediciones en estilo pesado y en estilo alpino. Algo hay por lo que sigue virgen. Lo que hace más bella esta montaña es descubrir el secreto por el que nadie ha subido”.
Jordi Tosas es posiblemente uno de los alpinistas más completos y polivalentes de las últimas tres décadas en el panorama europeo. No obstante, siempre estuvo alejado el star system y de la mercantilización de algunos de sus retos. Y cuando pudo, tampoco le interesó apuntarse al récord de los 14 ocho miles. Su figura tuvo algo de reconocimiento fuera del sector de la montaña cuando el mediático Kilian Jornet solicitó su colaboración en el proyecto Summits of My Life (Las cumbres de mi vida). El año 1992, con 23 años, se convirtió en el guía de montaña, UIAGM, más joven de Europa. Es un apasionado de la montaña y la naturaleza y vive volcada sobre ella los 365 días del año.
Jordi Tosas se formó en la escuela clásica del alpinismo, pero con los años fue evolucionando hacia el concepto “fast and light” (ligero y rápido). Ha participado en más de 30 expediciones al Himalaya. Tiene tres cimas por encima de los 8.000; Cho Oyu, Shisha Pangma y Broad Peak. El Cho Oyu lo descendió en snowboard y el Shisha Pangma con esquís. También es escalador de hielo y de grandes paredes. Formó la cordada junto con Oscar Cadiach, Manel de la Matta, Jordi Corominas y Valentín Giró que ascendió al K2, (8.611m) por la dificilísima vía Magic Line. El honor final recayó en Jordi Corominas que hizo cumbre.
Philipp Brugguer: «Me gusta llegar lo más lejos y lo más rápido posible en montañas técnicas»
Philipp Brugguer es un joven austriaco que se está iniciando en el himalayismo. Se trata de un alpinista que se mueve en la montaña con velocidad de vértigo, quizá marcado porque su otra pasión es el trailtunning o skyrunning. El mismo resume su folosofia destacando que «me gusta llegar lo más lejos y lo más rápido posible en montañas técnicas, de una manera fácil». Junto a Jordi Tossas afronta su segunda expedición al Himalaya. El año pasado ascendió a La Muztagh Tower, (7.273 metros) en el Karakorum considerada una de las montañas más bonitas e inaccesibles del mundo y con menos de 20 cimas. Este verano antes de partir al Muchu Chhish batió el récord de velocidad de ascenso al Ortler (3908m) -21 agosto- desde el pueblo de Sulden, sur del Tirol (norte Italia) pasando por el refugio de Hintergrat (2661m). Hizo cima en 1h y 48 minutos.
Expedición checa al Muchu Chhish
La llegada de Tossas y Brugger al Muchu Chhish será una sorpresa para la expedición checa formada por tres alpinistas -Pavel Korinnek, Pavel Bém y Jiri Janak– que llevan desde el 26 de agosto en la base de la montaña donde montaron la tienda de campaña a 4.026 m para preparar el ascenso a la cumbre. El 31 de agosto lanzaron su primer ataque, pero tras alcanzar el C3, a 6313 m, después de tres días agotadores y prácticamente sin descanso, decidieron regresar al campamento base a la espera de una ventana de mejor tiempo. Desde la red social que sigue su expedición escribieron que “vamos a informar a nuestros chicos de su llegada, esperemos que sea una motivación positiva para ellos.”
Hasta ahora, media docena de expediciones intentaron sin éxito la cumbre del Muchu Chhish.
Artículos relacionados:
Nepal sólo autoriza una expedición de la Guardia Real de Bahrein al Manaslu