Pau Capell se retiró en el Km 100 de la UTMB al quedarse sin fuerzas por los efectos de la infección en la pierna izquierda.
Pau Capell necesitó ingresó hospitalario en Barcelona para tratarse una celulitis infecciosa, que fue determinante para su abandono en la UTMB Mont Blanc. El corredor de montaña, que permanece hasta viernes ingresado, todavía arrastra molestias de la infección cutánea bacteriana y potencialmente seria sino se trata correctamente. El problema fue producido por un pinchazo realizado detrás de la rodilla izquierda que le hicieron el 17 de agosto con motivo de un tratamiento para reforzarla. Dos días después empezaron los problemas en la pierna y el 22 de agosto no podía caminar. El propio Capell destacó que “se me extendió y sentía un dolor muy intenso en toda la pierna. Además, se me empezó a empezó a hinchar la pierna y empecé a tomar medicación. Todavía faltaban diez días para la carrera de la UTMB. Yo sólo pensando en lo que me estoy tomando para que no diera doping en la carrera.”
No hay que olvidar que Pau Capell fue operado en julio de 2021 de una la lesión del cartílago de la rodilla izquierda y de ahi que el corredor «mime» esta rodilla.
Un pinchazo para un tratamiento de la rodilla izquierda fue el motivo de la infección que provocó la celulitis infecciosa en su pierna
El tratamiento de antibióticos funciono parcialmente, como se verá más delante, y se desplazó a Chamonix con la intención de tomar la salida. “Cuando llegue llevaba diez días sin correr. Sólo hacía bici en Andorra. No obstante, el miércoles -30 agosto- hice mi primer entrenamiento con motivo del Run With Pau Capell junto a aficionados. Ese entreno me sentó bien. Era el miércoles y la carrera el viernes. El jueves me digo…, me voy a meter un buen entreno y a hacer la última parte de la OCC con Roger Comellas. Y me encontré bien”.
Si no se trata correctamente, la infección se puede diseminar a los ganglios linfáticos y al torrente sanguíneo y puede poner la vida en riesgo con rapidez
Pau Capell tomó la salida de la UTMB -171km- pensando que el problema de la celulitis infecciosa en la pierna izquierda estaba solucionado. Todo fue bien hasta el km 30 cuando empezó a notar las primeras molestias. “tenía muchas rampas. Rampas en las piernas, en los gemelos. En mi vida deportiva había tenido está sensación en el cuerpo. Tomaba pastillas de sal, estaba comiendo bien con geles y bebía bien. Me empiezo a sentir mal y tras el avituallamiento de Contamines salgo y no pillo ritmo. Voy a un ritmo más lento del que quería. Empiezo a subir a la Valme y empiezo a sudar. Total. Llego al kilómetro 50 y sigo igual. Llegó a Courmayer, km 80 y digo bueno, estamos remontando, pero la sensación era de no hacer Breaking Twenty, obviamente. Y al salir de allí subo Bertone y llegó Bonatti. Bajo a Nuba, km 100 y digo basta, porque estaba caminando y no tenía fuerzas. Sin embargo, la pierna no la tenía hinchada, aún la tenía bien como la otra.
La infección volvió a aparecer cinco horas después de abandonar la carrera. “la pierna izquierda empezó a hincharse y comencé a tener calor en la pierna. Empiezo a hinchar, hinchar, hinchar hasta un punto de que por la noche mis padres me dicen… volvemos a Barcelona. Mis padres son médicos y Laura -su novia- es enfermera”.
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