Para hacer senderismo y caminar por la montaña es fundamental ir bien equipado.
El frío y la lluvia se han resistido a llegar incluso en zonas montañosas del norte, donde la mayor parte del mes de noviembre se alcanzaron más de 15 °C. La llegada de las borrascas Dora y Ernest puso fin a un tiempo inusualmente agradable (aunque cada vez más frecuente) y nos pone sobre aviso: es hora de cambiar el material para senderismo y adaptarlo al invierno.
Las aglomeraciones registradas en las primeras nevadas contundentes en zonas de montaña han demostrado que hay ganas de salir de la burbuja en la que la pandemia nos ha metido. Queremos respirar aire puro, tomar distancia de todo y desconectar. Es preciso llevar a cualquier sitio las medidas de seguridad propias del covid-19, que se sumarán a todo el equipamiento necesario para pasar una jornada agradable.
¿Qué se considera fundamental para hacer senderismo cuando se practica en meses con bajas temperaturas?. Lo repasamos punto por punto.
Ropa técnica para el senderismo
No solo hay que cuidar las prendas exteriores, que deben resultar aislantes. El interior cuenta, empezando por unos calcetines que logren aislar del frío y no lo hagan extensivo al resto del cuerpo. Una buena opción son los calcetines impermeables e incluso los calefactables que cuentan con baterías para funcionar de manera autónoma por unas horas, y que se pueden regular a diferentes temperaturas.
La ropa para senderismo en invierno debe pasar por térmicas y segundas capas, pantalones y chaquetas impermeables. El llamado GORE-TEX es un tejido muy popular para los aficionados al deporte en exteriores, especialmente los que se desarrollan en la naturaleza: senderismo, montañismo, esquí, escalada, ciclismo, etc. Se trata de una membrana impermeable, pero también transpirable, de manera que no calan el agua ni la humedad, pero sí repele el sudor y favorece la aireación.
Calzado adecuado para caminar
El GORE-TEX también está presente en el calzado como material imprescindible para el senderismo. Optes por el material que optes, es aconsejable considerar todos los factores que debe reunir el calzado. En invierno son más recomendables las botas que las zapatillas, por la diferencia de la altura de caña. El terreno estará más resbaladizo y las botas dan estabilidad, evitando torceduras o esguinces. Dependerá del tipo de terreno que se vaya a recorrer, claro.
La suela debe presentar buen agarre y tracción para adaptarse a la más que probable irregularidad del terreno. Tendrá una disposición de tacos apropiada para repeler el agua y evitar que el barro se incruste, en la medida de lo posible. El caucho y el poliuretano son los materiales más utilizados en su fabricación. En cuanto al revestimiento exterior, lo ideal es que sea impermeable. Pero, a la vez, debe tener una tecnología avanzada para dejar ir la evaporación que produce el sudor.
(Copyright/Abhishek-Gaurav)
Tecnología para no perderse
La tecnología se ha convertido en nuestra aliada para todo, y no hay por qué renunciar a ella ni siquiera cuando se trata de desconectar en plena naturaleza. ¿Acaso lo impide?. Los principiantes que se entusiasman con la actividad y quieren ir batiendo sus propias marcas, a la vez que cuidar hasta qué límites exponen su cuerpo, llevan un reloj pulsómetro para ir monitorizando la frecuencia cardíaca, su gasto energético e incluso sus sesiones de entrenamiento cargadas.
Quizás no te resulte imprescindible, pero sí deberías contar con un buen GPS. Más aún si no conoces la ruta, y más aún si crees que el camino podría estar mejor señalizado (lo que es muy habitual). Un dispositivo GPS de mano tendrá lo necesario, especialmente el software con mapas.
También es fundamental que lleves tu teléfono móvil cargado porque, aunque sea previsible que te quedes sin cobertura, siempre podrás llamar al 112 en caso de necesitarlo. Por cierto, si el itineario dura más de 24 horas, recuerda que es interesante llevar algun dispositivo con el que puedas cargar tu movil y que no dependa de un enchufe. Y al margen de la tecnología, como más vale prevenir que curar, mapas impresos y una brújula evitarán que te arrepientas de no haberte preparado mejor.
Complementos y otros elementos de seguridad
Llevar unas gafas, algo de alimento, agua y una mochila donde almacenarlo todo es lo mínimo. Dependiendo del terreno y de la actividad que vayas a realizar, los bastones de trekking también serán aconsejables.
Y ya, para componer el kit perfecto, deberías llevar gorro, una manta térmica y algo de ropa de repuesto, además de un pequeño botiquín con tiritas, un poco de alcohol y de mercromina, algodón y esparadrapo.
Aunque no se cuenta entre el material de trekking, está de más decir que llevar la cartera con tu DNI y la tarjeta sanitaria es obligatorio. En algún momento te puede ser de utilidad una navaja multiusos, especialmente si estás pensando en acampar o pasar la noche en un refugio.
Con todo, la lista anterior pretende ser una guía básica de material de senderismo en invierno que tú debes adaptar a tus circunstancias y al contexto de la ruta o rutas que vas a hacer. Lo importante es no escatimar en seguridad.
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