Sort y la Seu d’Urgell han formalizado una candidatura conjunta para optar a los Mundiales de piragüismo del 2019 con el apoyo de la Federación Española de Piragüismo. La experiencia de las dos sedes en competiciones internacionales ha sido determinante para unir sinergias y presentar un dossier conjunto a la Federación Internacional de Piragüismo (ICF). El Mundial reúne las tres disciplinas del piragüismo de aguas bravas: el slalom, el descenso y el estilo libre. La candidatura catalana entra en competencia con la ciudad eslovaca de Bratislava, que también opta a acoger estas pruebas. La votación para elegir la sede se hace el sábado 21 de marzo en el transcurso de la reunión que la junta directiva de la ICF celebra en Marrakech (Marruecos).
La votación para elegir la sede de los Mundiales del 2019 se hará el sábado 21 de marzo en el transcurso de la reunión anual que la junta directiva de la ICF celebrará en Marrakech (Marruecos).
El comité organizador, encabezado por sus respectivos alcaldes -Llàtzer Sibis, de Sort, y Albert Batalla, de la Sede d’Urgell serán los encargados de defender la candidatura ante la comisión técnica de la ICF. La candidatura catalana tiene el apoyo político del estado mediante el Consejo Superior de Deportes (CSD), que preside Miguel Cardenal, y de la Secretaria General de l’Esport de la Generalitat, que dirige Ivan Tibau.Tanto Miguel Cardenal como Ivan Tibau se desplazarán a Marrakech para impulsar las opciones de Sort y la Seu de ser escenario de los Mundiales de piragüismo del 2019. El hecho de que el madrileño José Perurena presida la Federación Internacional de Piragüismo (ICF) y a la vez sea miembro CIO, también es un factor que puede ayudar a la elección de la candidatura española. En la votación participarán 28 de los 29 representantes de la junta directiva de la ICF, ya que el catalán Lluís Rabaneda, presidente de la Comisión de Freestyle, debe abstenerse. La capital de Eslovaquia, Bratislava, es una candidata fuerte, pero Sort y la Seu están muy bien posicionadas ante la ICF, tras las copas del mundo, que se disputaron este verano, y el informe positivo que redactó la Comisión de Evaluación de la ICF.