La fatalidad se cobró la vida de un joven, de 30 años y natural de Zaragoza, cuando descendía en una embarcación neumática por el rio Gállego, en el término de Murillo de Gállego, junto a cinco personas, entre las que iba el guía y patrón de la embarcación de rafting. El luctuoso siniestro se produjo el sábado 11 de junio en torno a las 12.40 horas.
La embarcación volcó cuando estaba superando los rápidos del río Gallego con tan mala fortuna que uno de sus integrantes -todos iban con los elementos obligatorios, casco, chaleco salvavidas y traje de neopreno- fue arrastrado por la corriente. La víctima desapareció quedando sumergida y atrapada entre una gran roca a metro y medio de profundidad. La fuerza del agua dificultó mucho las tareas de rescate que debieron hacerlas equipos especiales de la Guardia Civil -EREIM, la Unidad Aérea y GEAS- desplazados hasta el lugar de los hechos.
El rescate, que se prolongó durante cuatro horas, fue muy complicado debido al caudal del río y a la fuerza con la que bajaba el agua, por lo que se tuvo que cerrar la presa de La Peña durante las labores de recuperación, según relataron en un comunicado de prensa fuentes de la Guardia Civil. La Guardia Civil deberá realizar un exhaustivo un informe sobre las circunstancias del accidente. El último accidente mortal, del que tenemos constancia, sucedido en esta zona se produjo en agosto de 2009.