◄Trágico suceso en el Himalaya; la expedición liderada por el famoso alpinista Kim Chang-ho al monte Gurja Himal (7.193 metros) acaba en desgracia. Sólo un único superviviente de los diez integrantes.
Nueve montañeros de una expedición surcoreana, entre los que se hallaba Kim Chang-ho, han fallecido en el Himalaya víctimas de una violenta tormenta de viento y nieve. La fuerza devastadora del temporal destrozó y catapultó todas las tiendas de campaña que tenían en el campamento base (3.500 metros) del monte Gurja Himal (7.193 metros), ubicado junto al Dhaulagiri en Nepal.
La expedición estaba formada por seis alpinistas surcoreanos y cuatro guías nepaleses que estaban acampados desde principios de octubre. Sólo se ha salvado un montañero que estaba en un pueblo del valle por motivos que se desconocen. Los fallecidos esperaban una ventana de buen tiempo para iniciar el ataque a la cima.
El grupo estaba comandado por el experimentado alpinista surcoreano Kim Chang-ho, muy conocido en el ámbito himalayista y una celebridad deportiva en su país ya que en 2013 se convirtió en el más rápido en escalar los catorce ocho miles sin la ayuda de oxígeno artificial.
Los otros fallecidos son: Yoo Younger-jik, Lee Jae-hun, Jeong Joon-mo y Rim Il-jin, conocido director de documentales y los sherpas; Chhiring Bhote, Lakpa Sangbu Bhote, Netra Bahadur Chantel y Phurbu Bhote.
Según la Federación Alpina de Corea del Sur pretendían escalar el Gurja Himal por una nueva ruta. El Gurja fue escalado por primera vez el 1 de noviembre de 1969 por el japonés Tomokuni Sagi y el sherpa Tenzing Lhakpa. La montaña no es objetivo de alpinistas renombrados ni de expediciones comerciales. Sólo se tiene constancia de que ha sido escalado por treinta alpinistas, lo que contrasta con los más de 8.000 que han hollado el Everest.
Según las primeras informaciones facilitadas por la policía del distrito Myagdi los cuerpos fueron vistos medio sepultados, a unos 3.500 metros, cuando se llevó a cabo la misión de búsqueda, que no se pudo completar. El helicóptero de salvamento desplazado no pudo aterrizar por las condiciones climáticas adversas. La operación de rescate sigue abierta y pendiente de la mejora del tiempo para poder acceder a una zona muy inestable por las últimas nevadas.
Esta desgracia es el accidente más grave que vive el alpinismo nepalí desde la avalancha causada por el terremoto de 2015. Entonces murieron 18 personas por la avalancha que se deslizó desde la ladera del Pumori al campo base del Everest.
